-->

miércoles, 7 de enero de 2015

Reflexiones absurdas

He pensado escribirle a B. He pensado escribir en tercera persona la historia de nuestro reencuentro en Madrid. Pero al final, últimamente, cuando escribo, siempre acabo escribiéndote a ti. Supongo que también influye que ayer me mandases un mensaje, que lo hayas hecho antes, durante y el último día de Navidad, a pesar de que yo te haya ignorado el 75% de las veces.

Quería escribir cosas bonitas, o feas más bien. Ya sabes, cosas bien escritas. Bueno, no sabes, tú qué vas a saber. Ni te imaginas que existe este blog, pero si te lo encontraras, a las horas de hacerlo te dirías a ti mismo que no te extraña. Supongo.

El tiempo. He visto documentales sobre esto últimamente y la peli Superstellar (ahora que lo pienso, me gustaría comentarla contigo) y ayer o antes de ayer (la verdad es que he perdido bastante la noción de esta variable) vi Lucy.  Existimos por el tiempo, sí.

He pensado en que el tiempo, a ti a mí, no nos importa. El tiempo no importa nada. Hay cosas que siguen igual siempre y otras que cambian de repente y da igual cómo fueran el minuto antes, es como si hubiera pasado 1000 años. El tiempo entre tú y yo funciona diferente, como casi todo entre tú y yo lo hace. O no funciona. Quizás el tiempo tampoco funciona.

Sí, me gustaría escribir o escribirte algo sobre el tiempo, hoy que te he contestado a tu último mensaje, el que me mandaste ayer. Quizás escribirle a ese tú que no existe sobre esas cosas que nunca pasarán, sobre esas conversaciones que nunca tendremos.

El tiempo, qué incógnita. Me pregunto si para ti sí ha pasado.

Esta noche, o mañana, si cumplo con mis mil obligaciones que no me dejan tiempo ni para dormir, te escribiré el post que no te mereces.

-------------------------


A Irache, muchas gracias por seguirme leyendo después de tanto tiempo.
A Russian, espero de corazón que las cosas te vayan bien.
Me he sentido tan... aislada que ni he leído vuestros blogs, ni he actualizado el mío, ni nada. Pero sabéis que siempre vuelvo. Y os leeré, y espero que a vosotras os haya ido en vuestras cabezas algo mejor que a mí en la mía. Últimamente me siento tan culpable por todo que hasta tengo remordimientos por no haberos escrito y leído... Sobre sabiendo que podéis haber estado jodidas.

Y a esa persona que me escribió ayer en una de mis entradas más míticas y patéticas, con el mosquito de bichos yendo hacia la luz y la frase de Wilde de título, GRACIAS.

Un abrazo fuertísimo a mis chicas y Feliz Año.

----

Editado 3 minutos después. Leo los títulos y primeras frases de vuestras últimas entradas y me digo: "Niebla, no, no, no, para. Acaba los trabajos que tienes que entrega y luego lo lees todo". Una llamando a la realidad y la otra diciéndole al mundo -y a sí misma- que la tiene que aceptar como es... Por eso os quería -y os quiero-, maldita sea. Os debo leeros, pero ahora no sé si puedo permitirme ciertos grados de reflexión. Joder, Niebla, cállate, ya, YA.

1 comentario :

Irache Permanyer dijo...

Leí esta entrada cuando la publicaste y creía que la había comentado, pero hoy me doy cuenta de que no. No sé donde tengo la cabeza...

Creo que si viviéramos en la misma ciudad,más de una vez nos hubiéramos encontrado en el cine; tenemos gustos muy similares... Además el último documental que vi sobre Einstein me hizo meditar mucho sobre el tiempo y el espacio, ya ves para que quiere saber todas esas cosas alguien que trabaja en... diremos una tienda para mantener mi anonimato jajaja.

Se te echa mucho de menos, Niebla, espero que pronto tengamos noticias tuyas.

Un abrazo y Feliz año (aunque casi estemos en febrero xD)