-->

viernes, 18 de abril de 2014

Sangre en los ojos.

Hola, Hobbit.

Si te digo la verdad, no sé por qué en algún momento pensé que pudieras tener algún tipo de sentimiento o de malestar por la situación actual entre tú y yo. Supongo que fue por tu mensaje a las 3 de la madrugada, que supongo escribirías estando un poco contentillo de más y, ya sabes, se supone que en esas condiciones florecen más los sentimientos de uno, no sé si sabes lo que es eso; son emociones, estados de ánimo, se sienten dentro y hacen a uno estar incómodo o, a veces, muy cómodo.

Ya ni siquiera me enfado contigo. He llegado a la conclusión de que no tienes la capacidad de sentir. Lo digo totalmente en serio. Te falla algo en el cerebro en ese sentido y no sientes como una persona "normal". Además, no soy la única que se ha dado cuenta. Psicópata no eres porque si no, no contestarías esas cosas sin sentido al whatsapp -los psicópatas se integran más-, un momento cabreado e intentando ridiculizarme, al siguiente echándome en cara que "pobre de mí, te has olvidado totalmente de que existo" y al próximo haciendo tu bienquedismo. Y ya no sé si no entiendes nada de verdad o haces como que no lo entiendes. Y tampoco yo entiendo lo que haces, poniéndote en contacto tú para luego eso. Pero supongo que no lo sabes hacer de otra forma. Cada vez soy más consciente de que tienes problemas en reconocer tus sentimientos y supongo que por esto también en manejarlos. Y creo que es irónico porque tú crees que la que no tiene control sobre los suyos, soy yo.

Asumo mi parte de culpa en el distanciamiento, pues que ha sido absolutamente necesaria. Pero este resultado me ayuda a darme cuenta del poco sentido que tiene todo contigo. Y del poco sentido que tiene tu vida. Puede que tú creas que la mía no tiene mucho más, pero al menos hago lo que puedo. Puede que seas la persona más conformista que conozco. Sí, creo que sí. Y siendo así, ¿por qué iba a importarte perderme? Te conformas y ya está. Yo pensaba que a lo mejor no, por lo que pasó el Junio pasado pero... ha pasado mucho tiempo. Y a ti el tiempo siempre te ha hecho olvidar. Ya me lo dijiste al conocernos: "Como sabía que no podía ser, me olvidé y ya está". Pues eso habrás vuelto a hacer.

Al menos te habrás dado cuenta de que tus memeces de quinceañero no valen conmigo. A mí me duelen las cosas de verdad, no digas cuatro gilipolleces de mí en un grupo de whatsapp. Además, ya viste que no tengo ningún problema en soltarte un "que te jodan" delante de todos. Es más, creo que por ese camino tienes muy claro que llevas las de perder. Sólo tienes que recordar cualquiera de esos momentos en los que enfurecido me has gritado "No utilices tu ironía conmigo" o "Me has dejado en ridículo delante de todos". Siempre te ha importado más lo que pensarán los demás que yo.

Pero da igual, no es una guerra, aunque tú hagas de todo una guerra. Y, ¿sabes qué? Tenía un email escrito para ti, Amy lo leyó y me dijo que te lo enviase, pero no lo hice. Creo que hice bien, porque te lo hubieras pasado por el forro de los cojones igual que lo que te puse por whatsapp. Y eso que te lo puse por tu puta insistencia, y pasaste de violento a víctima en un par de segundos. Qué irónico todo.

Es una pena haber perdido tantísimo tiempo y energías contigo, que estás tan vacío, y cada vez más. Pero, como te he dicho otras veces, sólo puedo sentir lástima -y tristeza, mucha-, porque hay cosas que nunca sentirás, porque no puedes. Y habrá ocasiones en las que sea mejor para ti, pero en otras te perderás cosas absolutamente geniales, y no hablo solo de amor o sexo (aunque también).

Yo he hecho lo que he podido, Hobbit. Mientras me dejaste, te acerqué por primera vez a ese mundo de sentimiento y sexualidad. Siempre he intentado acercarte al mundo de los sentimientos y también al de la razón, a lo que yo creo que es la vida. Y parecía que te gustaba. Intenté que vieras más allá de lo que tú pensabas que era la realidad y también me esforcé mucho por conocer tu mundo, me acabaste convenciendo para participar en la peña durante las fiestas del pueblo, yendo a actos (como La Fiesta) y lugares en los que no podría sentirme más fuera de lugar, donde la única forma de diversión es el alcohol, las drogas y hacer que lo flipas. Para mí, todo eso, está igual de vacío de lo que pareces estar tú. Y yo no tenía que salvarte, ni tú a mí.

Así que no me enfado, sólo me da pena, como te dije ayer. Me da pena saber que durante un tiempo fuiste -un poco- más que eso pero que ya no lo eres, ni quieres serlo. Y lloro. Porque yo sí tengo sentimientos.

Good Riddance, yo me retiro, ya del todo.

No cuentes con el café de Junio, ni de nunca.


No hay comentarios :