-->

jueves, 5 de septiembre de 2013

Escribir como desahogo, ¿acaso no es también escribir?

Soy muy consciente de mis limitaciones literarias a la hora de escribir. No sé si os habréis dado cuenta, pero soy una persona perfeccionista en exceso. En ese sentido, este blog es un desahogo, pues el 99% de las veces simplemente vomito lo que tengo en la cabeza y le doy a publicar. No corrijo puntuación, ni erratas de deletreo y, además, uso oraciones subordinadas como si no hubiera un mañana, con montones de incisos, paréntesis y rayas: escribo como si estuviera hablando, al menos en un 80% de las entradas. Y cuento lo que nadie sabe, lo que no le expreso ni a Juno. A veces, expreso cosas que ni yo misma sabía que llevaba dentro; cambio de perspectiva, me re-conozco y a la vez todo lo contrario. Y, al fin y al cabo, creo que eso es escribir. Por lo menos para mí.

Para reseñas de libros, películas y música, textos de opinión sobre temas de la vida cotidiana o reflexiones filosóficas abstractas tengo otro blog, con mi nombre de verdad, que pueden leer mis amigos y hasta mis parientes. Pero ¿soy esa yo? ¿O soy esta? Supongo que soy las dos, aunque creo que esta "yo", Niebla, es más real.

Esos nervios al pensar que algún conocido
nos pueda descubrir, también molan.
Como cuando frunjes en un lugar que
 no debes y te da miedo que te pillen.
Escribir desde el anonimato y leer otros blogs así escritos tiene un encanto especial, y crea adicción. A veces, también, he sentido mucha tensión pensando en que quizás algún conocido de mi vida cotidiana terminase aquí, puesto que sabría quién soy leyendo un par de entradas o, incluso, un par de frases determinadas de alguna de ellas. 

Pensarían que estoy loca. ¿Pensarían que soy bipolar, que tengo dos personalidades? La mayoría, sí. O tres. Se sentirían raros volviendo a hablar conmigo. Les daría miedo. Me atrevo a decir que todos, excepto Amy y otra chica amiga común (loca a los ojos de la mayoría), se sentirían así. ¿Por qué? ¿Por qué no podemos sentir así, con nuestros altos y nuestros bajos? ¿Por qué no podemos necesitar verbalizar todo eso que se nos amontona dentro y nos devora? 

¿Por qué escribo entradas y entradas contando mis desventuras amorosas, mis sueños, mis avances y retrocesos, mis miedos...? Pues porque lo necesito.

A veces pienso que las que me leéis os merecéis algo mejor que un montón de sentimientos contradictorios y repetitivos escupidos sobre el teclado. Pero estáis ahí y leéis, más o menos con regularidad. Alguna os sentís identificada, a otras os hago gracia y a alguna le daré curiosidad. Y hasta llega alguna nueva, aunque no comente, y me meto en su blog, leo y pienso: "Otra más que necesita desahogarse y va a probar". 

No lo dejéis. Aunque no os comente nadie, aunque empecéis con 2 visitas al día. ¿Escribís para que os lean? Yo no. Y eso también es contradictorio. He leído en tantos sitios que todos escribimos para ser leídos... Joder, nos hace ilusión, pero ¿y todos esos words que tengo en la carpeta de "rayadas" y que nunca han visto la luz y no la verán (en su mayoría)? ¿Esas cartas al Hobbit, a B, al Duendecillo? ¿Los relatos cortos de finales amargos? ¿Los diálogos de tres páginas?  ¿Para quién los escribí? ¿Para qué? Ahí (y aquí) descansa mi verdadero yo y no en los relatos y reseñas de mi otro blog.

Y ahora pienso... ¿cómo he llegado a escribir esta entrada? Yo sólo quería contar que hace unos días me propuse retomar la idea que tenía para una historia escrita (me da mucho respeto decir novela). Y mirad, ¿lo he contado? No. A lo mejor no era eso lo que más anhelaba transmitir. ¿De dónde ha salido esta parrafada? Si antes de darle a "crear entrada" no pensaba escribir nada parecido. También ahí está la magia de escribir. La magia de, tantas veces, no saber qué vas a poner hasta que lo ves apareciendo en la pantalla. Así que, bueno, sigamos con la costumbre, ¿no? Dos intros, un punto y "publicar". 


.

4 comentarios :

Desventuras dijo...

Un aplauso, Niebla... Gran entrada que me ha gustado mucho porque es algo que llevaba rondándome la cabeza varios días. ¿Por qué escribo?...
Escribo realmente porque me apetece hacerlo y contar mis cosas (aunque me repita más que un disco rayado) sí, está claro que a todos nos gusta que nos lean pero... suelo escribir para mí, para desahogarme y no quedar como una loca histérica delante de mí gente (aunque ya saben que soy una loca) Muchas veces me apetece contar más cosas pero temo que lleguen hasta a mí y me miren más raro de lo que ya me miran, esto es como una especie de diario y terapia, al menos para mí.
Escribe lo que te salga porque esas son las mejores entradas, yo te sigo y te leo siempre aunque ahora estoy sin ordenador y me cuesta más poder entrar.
Tus comentarios me suelen animar porque es como que estoy acompañada en la distancia, que alguien me entiende.
Un beso y un abrazo. No dejes de escribir a no ser que sea porque te haya tocado la lotería y estés viviendo un mundo de lujos y desenfrenos jajajaja (aunque eso también me alegraría leerlo)
PD: No me acuses de cotilla :)
Se te ha echado de menos por el mundo blogger
RB

Niebla dijo...

Muchas gracias, Russian. A mí también me gusta mucho cuando me comentas, o cuando me comentan PC o Chari, o hasta algún anónimo. Me gusta sobre todo porque me hace sentirme menos desequilibrada. Y es curioso porque nos leemos y nos leen (seamos realistas, las demás no dan la misma sensación de inestables que nosotras") y, sin embargo, de alguna forma (o eso creo yo) sabemos que detrás de todas estas entradas caóticas hay una persona normal, seguramente más normal que muchas otras que no escriben nada de esto. Probablemente más normales que esas que parecen normales en su vida cotidiana (yo sé que no lo parezco a un porcentaje importante de la gente que me rodea, y me enorgullezco, me gusta ser "rara", y lo hago sin querer).

Yo no puedo no escribir. Hasta cuando estaba en UK escribí algo, en cuanto me quitaron la escayola. Que no publique no significa que no escriba tampoco. No puedo no escribir. Me mantiene cuerda, es algo como lo que tú dices. Si no saliera en el papel (pantalla), saldría de otra forma. Necesito que alguien me entienda, y cuando escribo me entiendo. Es increíble cómo paso a veces de no identificar lo que siento o por qué lo siento a hacerlo. Y eso lo consigo escribiendo, divagando... Leyéndolo después y dándome cuenta, a veces, de que estoy más triste de lo que creía, o de que soy más débil o, a veces (y esas me hacen sentir bien), más fuerte. Y de lo relativas que son algunas cosas (cuando lees pasado un tiempo te das cuenta).

Y ya paro, que seguro que ni lees el comentario :)

Desventuras dijo...

jajajaja sí que lo leo, sí, lo que pasa es que sin ordenador proprio es más difícil entrar.
Sii, tienes toda la razón, tengo miles de hojas y de documentos en el ordenador con miles de cosas que nunca llego a publicar pero que me ayudan, si no lo hiciera me acabaría estallando la cabeza y sería una especie de loca de los gatos como en los simpsons.
yo también soy "rara" o me consideran "rara" pero cuando entras por estos mundos y ves las cosas que publican te sientes (a veces) menos sola y más comprendida, esto es una buena terapia. Ya sabes que tu blog es un vicio sano para mí :) Me alegra haberte encontrado por estos mundos

Anónimo dijo...

Hola Niebla, llevo leyendote desde hace unas horas ya, cai por "casualidad" en tu blog tras haber buscado en google una frase de Oscar wilde (supongo que sabras a que entrada me refiero) y tras haber leido algunas muchas de tus tantas entradas senti la necesidad de decirte lo mucho que me gusta tu manera de sentir, pensar, expresarte y escribir.
Seguire leyendote de vez en cuando, seguramente cuando en lo mas profundo de mi este buscando una manera de expresar lo que siento , pienso y la encuentre "por casualidad" en alguno de tus posts.
De nuevo, Gracias


(Pd : te animo a escribir, aquello que aun te da mucho respeto definir como una novela )