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viernes, 16 de septiembre de 2011

Wake me up when september ends



Tampoco es que me vaya taaaaan mal el mes. Lo que pasa es que no sé qué es lo que yo quiero (por variar, ya sabéis). Lo siento si el título induce a engaño, que no lo creo. Hago lo que me sale. Estoy tomándome eso de hacer lo que me apetece demasiado en serio.

Me han admitido en la Universidad otra vez. En la de mi ciudad. Hoy mismo voy a hacer la matrícula. No creáis que empiezo una carrera relacionada con la anterior que ya tengo terminada y que me ha servido para trabajar los dos últimos años, no. Empiezo una que no tiene nada que ver. NADA. De hecho no me convalidan ni un miserable crédito. Pero me da igual. Hay gente que cree que me he vuelto loca. Esa gente no me conocía. Al resto (como Juno, el Hobbit o mi señora madre) les he sorprendido levemente, pero la "decisión" (quizás debería decir el impulso) les encaja perfectamente en mi modus operandi, y me animan.

Aún así, todavía esperaré por si me aceptan en la ciudad de Juno y entonces tomar una decisión. Uuuuh, con lo que me mola a mí tomar decisiones. Pero lo cierto es que desde que volví a casa de mi madre me convertí en un ser diferente, mucho más limitado e infeliz. Cualquiera que haya vivido solo (o con amigos/pareja/ect) sabe lo que se siente cuando vuelves a casa de tus padres.

Por otro lado, esta noche tengo un estúpido compromiso de reunión social por alguien que envejece. Después de rogarle ayer al Hobbit casi de rodillas que no me deje sola toda la noche con esa malvada gente, creo que no puedo caer más bajo. Bueno, sí, lo caeré cuando esta noche me deje sola y luego le vea por ahí de risas con la gafapasta y me me meta en el baño guarro de algún antro a deshidratarme por los ojos. Y ¿todo por qué? Pues porque como ya habréis intuido, aunque el finde pasado salí a por lo que era mío, cogí otras cosas prestadas también (me entra la risa), y el pobre hobbit lleva toda la semana con un careto casi hasta el suelo, por lo que ayer, después de insistirle en que me acompañase esta noche, le aclaré que el maromo de cuerpo escultural con una ingeniería terminada, la carrera de piano y 4 años de guitarra, no me interesa demasiado, y que prefiero que venga él. Mal hecho, lo sé. Pero su cara era de tristeza, joder. Yo no podía vivir con eso, se ve que no soy un ciruelo auténtico. O quizás lo soy totalmente... ¿Juno? ¡Ayuda! Juno me va a reñir MUCHO por esto.

Vivamos yo y mi patetismo. Y viva su perrohortelanidad (la del Hobbit, no la de Juno). Porque estoy segura de que ahora que la tranquilidad vuelve a su cabeza pensando que no va a pasar nada con "el mister" (como él lo llama), volverá a tomarse las cosas con esa infinita calma suya que le caracteriza. Ya veremos como transcurre la noche con uno y otro, en el supuesto de que la criatura aparezca, cosa que dudo muy, muy seriamente, a pesar de que ayer me dijera que convencería a sus amigos y me diera la mano en la calle ante mi total perplejidad después de desmentir mi amor por el míster.

¿Y sabéis que os digo? Que al final da igual, que pase lo que B quiera hoy, que mañana a primera hora yo me voy con todo el pedo o la resaca o lo que sea a perderme con Juno a la montaña el resto del fin de semana, lejos de toda esta gente que se empeña en ponernos piedricas en los zapatos. Así que Hobbit, Míster, "mejor" amiga, Ciruelo, Gafapasta... Que os jodan a todos.

Feliz fin de semana.

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1 comentario :

Nikki dijo...

Como te entiendo! Yo este año hago 2º de carrera en mi ciudad en vez de quedarme fuera como el año pasado, que estuve en un piso... encima me dijeron ayer que me admitían, y todavía no me he hecho a la idea de decir adiós a toda la libertad q tenía -.-'