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martes, 13 de diciembre de 2011

Ay, qué pereza



Soy una vaga. Pero mucho. No lo soy para trabajar, es decir, una vez me meto en algo lo hago a conciencia, pretendiendo la perfección, o no lo hago. O en un puesto de trabajo, pues no paro de trabajar. Pero ay, los estudios son otro tema.

He dejado trabajos para el último día y lo sigo haciendo. Ahora se me vienen encima, y mi plan magistral de ir mañana o pasado a una tutoría se ha visto truncado por los planes del profesor, que el miércoles no viene. Mañana madrugaré para estar en sus extrañísimas horas de tutoría en el despacho, pero con pocas esperanzas, así que tendré que dejarle unas cosas en el casillero con una nota patética y... en fin! ¡Qué estrés! He estado hoy una tarde entera partiéndome la cabeza probablemente para nada...

Por otro lado soy una payasa y, como ya habéis leído en el post anterior, una acomplejada de mierda.

Llamé al hobbit y no me lo cogió, aunque después me llamó él (dijo que no había visto la llamada y blabla, y como soy tonta pues le quiero creer). Estuvimos hablando un ratico. Bien, normal, unas risas y decirme que estaba casi bien. No le conté mis jaleos con el grupo de amigos aunque me preguntó varias veces; lo único que le conté fue la pérdida de mi teléfono.

Lleva 3 semanas sin fumar (ya serían huevos con el chungo que le dio) y, por cierto, no fue a la fiesta de la Gafapasta (Juno, has ganado una apuesta en la que no nos habíamos apostado nada: felicidades).

Por lo demás, tengo un patético y enorme deseo de verle que no se puede materializar hasta el jueves y que a saberse si lo hace porque no está en mucha disposición de salir y "además no puedo beber alcohol ni fumar". En fin, nunca ha sido mucho de salir los jueves y para colmo, claro, tenemos... ¡aniversario al canto! Que si me has alegrado el invierno, que si ahora vas a ser feliz, que si hago la ciruelada de la noche y te compro una rosa, que si me siento como si tuviera 15 años (y lo demuestro escribiendo tu nombre en un cristal empañado). Joder, debe ser por la saturación y violencia que tengo dentro después de hacer tanto trabajo que empiezo a ver esas cosas como las cirueleces de adolescentes que eran (sin ser adolescentes, claro).

Empiezo la semana como el maldito culo y encima el lunes de la que viene tengo que ir a hacerme pruebas médicas, a ver si esta vez no se estropea el tubo conmigo dentro como la anterior.

Joder, soy una vaga de mierda que pudiendo haber acabado ayer un trabajo y entregarlo hoy, lo he dejado por pereza y me he metido en un berenjenal que déjate a ver si no me cuesta la asignatura. No he podido ni sacar a mi pobre perro que es el ser que más amo en esta tierra y encima echo de menos a Juno, al Hobbit del demonio y me siento forever alone. Ahora una forever alone llena de conocimientos, eso sí, después de terminar un trabajo que me da que ni podré entregar y que encima está bien (porque eso es lo que me pasa, que lo hago bien, pero soy una vaga)...

Ay, qué vida esta...

Feliz semana.

1 comentario :

Nikki dijo...

Yo siempre tengo la solución:
http://thenicestplaceontheinter.net/ para cuando te sientas forever alone... esto deberías meterlo en tu etiqueta "maximum pathetic"